• Login

Si no trae preguntas, no es algo nuevo

Mezclar universos, juntar cosmos: desaprender y volver a aprender. El mensaje es para quien esté dispuesto a sentirlo. “Queremos salir de la endogamia LGTBIQ”, apura Lisa Kerner, corazón de Casa Brandon, refugio cultural que cumple 12 años. En su entramado, Casa Brandon tuvo como principal objetivo generar alguna pregunta que no se había disparado aún. Y el motor fue hacerlo desde el artivismo: activismo político comandado desde el arte. “No sólo reunimos mundos de sexualidades, también abogamos por ‘salir del barrio’ y cruzar edades”.

Curiosamente, todo comenzó con un “no”, con sentirse en disconformidad con los boliches, discotecas y movidas. “Pasaban música que no nos gustaba. Queríamos sumarle un condimento a la pista de baile, un lugar para charlar, ya que eso genera encuentros que explotan en proyectos”, dice Lisa. En parte, su inspiración fue la Age of Communication con el eco de Belleza y Felicidad y Ave Porco, fiestas que manifestaban ruptura en el tejido social y sexual, una escenificación de la diversidad que para ese momento estaba postergada. “Nos gustaba ese espíritu comunitario”.

LEER NOTA COMPLETA